El Salvador ha logrado pasar de ser el país más inseguro del mundo, al país más seguro de América.
¿Cómo lo logramos?
Metiendo a los criminales en la cárcel.
¿Hay espacio?
Ahora sí.
¿Podrán dar órdenes desde adentro?
No.
¿Podrán escapar?
No.
Una obra de sentido común.